Hogar dulce hogar... Así terminaba la publicación anterior, y cuando veáis las fotos, entenderéis el por qué.
No hubo dudas, de entrada supo muy bien dónde y cuál era su camita... que a decir verdad no la hemos probado por que no cabemos, pero ganas no nos faltaron...
Gala nos ha confesado que es muy cómoda y caliente... pero no acaban ahí las hazañas de la grumete, también quiso probar la nuestra, y dicho y hecho.
Un par de bostezos mañaneros, cara de buena y a conquistar mundo.
Como buenos Papis, dejamos que retozara libremente y a sus anchas. ¿Habremos hecho bien...?