El Viernes pasado, Luke, el hermano de Gala... la invitó al "Parque de perros" para jugar con él y con otros canes. Hay que decir, que fue una experiencia muy interesante.
En primer lugar, reconocer que estábamos un tanto nerviosos por la cantidad de perros que había en el parque, y por supuesto, no eran Whippets... habían Rottweiler, Setters, Boxer, Pinscher y un sin fín de razas que ni siquiera llegué a conocer.
De entrada y como saludo, uno de los perros grandes que correteaban por allí marcó a Gala cogiendo su cabeza entre sus dientes... Ufff. Muy hábil Gala, supo ser sumisa y se tumbó en el suelo para darse a conocer y presentar respeto a todos sus congéneres que cual motín carcelario rodeaban a Gala. Una vez hechas las presentaciones, a correr con grandes y pequeños y tomando de vez en cuando las riendas de la carrera. Destacar que a Luke y Gala no había valiente que los alcanzase corriendo...
Ahora que escribo esta publicación y a toro pasado, he de confesar que "nos acongojamos vivos" con tanto perro y tan grande... pero eso sí, una gran experiencia y positiva para todos.
Agradecer a Irene Castro la serenidad que nos transmitió en todo momento y sus consejos sobre sociabilidad.